Sexólogo – Definición

La figura del sexólogo es cada vez más reconocida, sobre todo en los últimos años ya que son frecuentes las intervenciones mediáticas de los colegas más destacados. Sin embargo, la mayoría de las personas no tienen en claro qué es y que hace un sexólogo, y en qué casos es conveniente consultarlo. Vamos entonces a clarificar estos conceptos.

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Un sexólogo es un profesional médico o psicólogo que realiza una especialización en sexología clínica. No existe la sexología como carrera, es decir que no se puede estudiar directamente sin antes poseer el título de médico o psicólogo. Por supuesto que según la profesión de base el enfoque será distinto. Un médico-sexólogo trabaja más en trastornos sexuales de causalidad orgánica, y un psicólogo-sexólogo interviene si el problema es predominantemente psicológico.

El sexólogo trabaja específicamente con disfunciones sexuales, es decir con las diferentes perturbaciones de la respuesta sexual en varones y mujeres: disfunción eréctil, eyaculación precoz, disfunciones orgásmicas, disminución del deseo, hiperactividad sexual, fobias sexuales, vaginismo, matrimonios no consumados, trastorno de la excitación sexual en la mujer, etc. También interviene en casos de trastornos de la identidad sexual, parafilias (o perversiones) y homosexualidad no asumida. Para eso cuenta con un entrenamiento para utilizar herramientas específicas destinadas a resolver el síntoma sexual.

El Trabajo del Sexólogo.

Probablemente usted pertenezca al 95% de las personas de nuestro país que no tiene idea de que hace un Sexólogo, además, haga parte del casi 99% de la población que jamás ha visitado uno, y, haya sido justamente eso, lo que hizo que se detuviera al ver este titular; es por eso que hoy quiero dedicar estas líneas a informarle cual es nuestro trabajo y la importancia que tenemos, aunque poco visibilizada, para la población.

Y es que al decir “Sexólogo”, tal vez se le venga a la cabeza algo como el Kama Sutra o el Ananga Ranga (antiguos textos hindúes usados como manuales sexuales), y, al conocer alguno(a) incluso un chiste flojo, como ¿cuándo me puede dar una clase particular?, -con tono malicioso por supuesto-.

Sin embargo, a pesar del desconocimiento casi generalizado de esta rama, al menos en nuestro país, la Sexología es una disciplina reconocida por la OMS (Organización Mundial de la Salud) desde 1974, que estudia sistemáticamente la salud sexual y reproductiva humana, definida como el proceso permanente de consecución de bienestar físico, psicológico y sociocultural relacionado con la sexualidad, que es una dimensión fundamental del ser humano que implica el sexo, incluye al género, las identidades de sexo y género, la orientación sexual, el erotismo, la vinculación afectiva, el amor, y la reproducción.

Por tanto, la función del sexólogo trasciende lo que nuestra imaginación nos lleva a pensar, resultando, a decir verdad, mucho menos erótica de lo esperado, ya que gira en torno a la promoción y defensa de los derechos sexuales y reproductivos, proclamados en 1997 por la WAS (Asociación Mundial de Sexología), los cuales son considerados derechos humanos y que incluyen el derecho a la libertad sexual, a la autonomía, privacidad y equidad sexual, al placer y expresión emocional sexual, a la libre asociación y decisión reproductiva, a la información científica,  y, a la educación y atención de la salud sexual.

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Incluye además la investigación en temas de sexualidad, la intervención en salud pública para la creación de estrategias que permitan garantizar esos derechos, actividades en educación sexual para la comunidad, actividades docentes en la formación de nuevos profesionales en el tema, asesoramiento sexual, y claro, la atención de personas con alteraciones en su función sexual; y, dado que todas estas actividades propenden por los derechos anteriormente mencionados, la población en general requiere en algún momento de su vida, aún sin saberlo, de un sexólogo.

Los sexólogos son profesionales con estudios de postgrado que los capacitan y autorizan para ejercer como tales, con mayor frecuencia de la salud, aunque profesionales en ciencias humanas (antropólogos, pedagogos entre otros) pueden educarse en sexualidad, lo que les permite abordar la temática desde un ámbito comunitario, existiendo entonces programas de formación multidisciplinarios en educación y en promoción de la salud sexual; sin embargo, la atención de las alteraciones del individuo se reservan a los Sexólogos Clínicos, que son exclusivamente médicos y psicólogos que pueden hacer uso de estrategias terapéuticas para el abordaje de los problemas sexuales.

El Sexólogo es entonces un profesional que realiza intervenciones individuales y colectivas que garantizan la salud sexual de la población; así las cosas, la consulta al sexólogo puede ser necesaria para abordar temas diversos, como el desarrollo en las diferentes etapas de la vida, cómo educar a los niños y jóvenes en temas de sexualidad, las relaciones de pareja, el amor y el erotismo, la actividad sexual y los problemas de la función sexual.

Si desea más información o pedir cita previa utilice el siguiente formulario. En Sexólogos Valencia. Clínica de Sexología y Psicología Pérez – Vieco le atenderemos en horario de lunes a viernes de 9 a 22 horas.

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